
A medida que la demanda por trabajadores aumenta en un mercado laboral mejorado, muchas organizaciones luchan por atraer candidatos con las habilidades y experiencia deseadas. Esto coloca a los profesionales talentosos en una posición más sólida de negociación, no solo con los posibles contratantes, sino también con los empleadores existentes.
Muchas organizaciones están tratando de contratar personal nuevo para impulsar el crecimiento en un mercado en mejora, y lo último que quieren ver es que sus mejores talentos se vayan. El desgaste del personal perjudica a las organizaciones – afecta la productividad y cuesta dinero. Si las empresas no pueden retener a los trabajadores calificados que ya tienen, enfrentan el doble de dificultades para asegurar a las personas con las habilidades y la experiencia para llevar a su organización hacia adelante.
Como tal, los profesionales pueden negociar una oferta salarial más alta y/o beneficios con su actual empleador, en un intento por evitar cambiarse de trabajo.
¿Estás en condiciones de negociar una oferta salarial más alta?
Si estás ansioso por obtener un aumento de sueldo o mejorar los beneficios que recibes en tu trabajo, la primera pregunta que debes hacerte es "¿me lo merezco?". Intenta ser objetivo al evaluar tu desempeño mientras estás con tu empleador actual - ¿has logrado agregar un valor significativo a tus equipos y a la organización en general? ¿Puedes probarlo? ¿Has recibido excelentes comentarios de tus gerentes y jefes?
Si la respuesta a estas preguntas es sí, entonces podría haber margen para negociar un aumento de salario con tu empleador actual. Los trabajadores que contribuyen directamente al crecimiento organizacional y al resultado final – tal vez trabajando en proyectos/contratos clave, logrando altas cifras de ventas o creando nuevos productos/servicios – simplemente valen demasiado para que una organización los deje partir sin luchar por ellos.
Los empleadores inevitablemente saben quiénes son sus mejores trabajadores – sus miembros más valiosos – y estarán ansiosos por mantenerlos el mayor tiempo posible. Esto no significa que necesariamente vengan a ti con una oferta de más dinero. Sin embargo, si eres un profesional altamente valorado y solicitas un aumento de salario, puede haber una buena disposición para negociar.
Por el contrario, si has estado luchando en tu trabajo y no has logrado desempeñarte al nivel esperado, es posible que tu empleador esté menos propenso a entablar una negociación salarial. Solo ofrecerán lo que sienten que un individuo vale para la organización – por lo que aquellos que muestran un bajo rendimiento no tienen el mismo poder de negociación. En algunos casos, los empleadores pueden incluso estar contentos de que los miembros del personal se vayan, por lo que pueden reemplazarlos por otros con un mejor desempeño por el mismo dinero.
¿El mercado te da ventaja?
Si estás buscando negociar tu salario, otro paso importante es comparar tu ingreso actual con el del mercado. La Guía Salarial también pronostica los salarios promedio para el próximo año y predice la tasa de inflación salarial para alguien que trabaja en tu cargo. En términos generales, cuanto mayor sea el nivel de demanda de alguien con tus habilidades, mayor será su salario.
La pregunta es, ¿está bien lo que tu empleador actual te está pagando? Si lo que ganas se ubica en el extremo inferior de lo que recibe alguien en tu cargo, en tu región, entonces puede haber justificación para tratar de negociar. Sin embargo, si la Guía Salarial muestra que ya estás ganando tanto – o más – de lo que alguien en tu cargo puede pretender, entonces eso sugiere que tu empleador te está cuidando bien. Solicitar más dinero a una organización ya generosa podría dañar las relaciones con la gerencia y – a menos que realmente seas una excepción – resultará ser un ejercicio infructuoso.
Si ya te pagan bien por el rol que desempeñas, pero aún estás ansioso por ganar más, puede ser el momento de orientar tu promoción hacia un rol que conlleve una mayor responsabilidad.
¿Qué estoy dispuesto a aceptar?
Otras preguntas que debes hacerte antes de las negociaciones son: ¿qué nivel de salario esperas y qué estás dispuesto a aceptar? La información de la Guía Salarial puede proporcionar un contexto para tus negociaciones, ya que revela cuánto ganan aquellos que tienen un mejor desempeño en tu cargo actual. Si sientes que encajas en este grupo, es perfectamente razonable establecer un salario – o el equivalente en beneficios flexibles – en el extremo superior del rango. Siempre es aconsejable pedir un poco más de lo que pretendes al momento de negociar el salario, ya que generalmente tu empleador hará una oferta más baja.
Si eres un profesional top, estarán ansiosos por retenerte, pero querrán hacerlo al menor costo adicional posible para la organización. Sin embargo, siempre considera que los empleadores también tienen acceso a guías salariales. Pedir más de lo que cualquier profesional en tu función podría pretender es incompatible para crear la impresión correcta en tu empleador.
¿Por qué me deberían ofrecer un acuerdo mejor?
A menos que, como profesional, puedas presentar un caso efectivo para que te ofrezcan un salario más alto, puedes esperar poco o nada de las negociaciones salariales. Los empleadores pueden saber y apreciar dónde se encuentran tus talentos, pero aun así necesitarás decirles por qué deberían ofrecerte más dinero o mejores beneficios. Como dice el refrán, 'si no pides, no obtendrás'. Por lo tanto, cuando inicies una negociación salarial, asegúrate de contar con una serie de argumentos y ejemplos de tus logros.
Ser capaz de demostrar tu valor para la organización en esos términos te brinda la mejor oportunidad posible de recibir una oferta contractual mejor. Si estás marcando una diferencia real para el éxito de tu empresa, y eres plenamente consciente de esta contribución, es posible que tu empleador no tenga otra opción que reflejarlo en tu salario. La alternativa es que proporciones la misma información en una entrevista para un nuevo trabajo y tu empleador corra el riesgo de perderte ante una empresa de la competencia.
Creando un equipo ganador
Alcanzar nuevos niveles de eficiencia y productividad se ha convertido en una necesidad, permitiéndole a las empresas mantenerse actualizada en su área, en un mercado competitivo – y sus gestores son responsables por motivar y asesorar a cada uno de los individuos en pos de obtener la mejor performance del equipo para la empresa